Samsung vuelve a mover las piezas de su tablero, pero esta vez no todos los usuarios están contentos con la jugada. Con la llegada de One UI 8, la compañía surcoreana estaría restringiendo aún más una función que, aunque desconocida por la mayoría, es vital para los entusiastas de la personalización: el desbloqueo del gestor de arranque, también conocido como bootloader.
Una opción para la personalizacion aparentemente llega a su fin
Aunque en mercados como el estadounidense esta opción lleva años siendo prácticamente inexistente, otros territorios aún contaban con esa libertad. Pero esa historia parece estar cambiando. Varios reportes, incluido el medio especializado SammyGuru, señalan que la opción «Desbloqueo OEM» ha desaparecido de los ajustes de desarrollador en los nuevos Galaxy S25 Ultra y los plegables Z Flip 7 y Fold 7, todos ellos con One UI 8 instalado.
¿Qué significa esto para el usuario común? Muy poco. La gran mayoría jamás toca ese tipo de configuraciones. Pero para una comunidad muy activa los que flashean ROMs personalizadas, instalan kernels modificados o buscan sacarle el jugo al hardware mediante el acceso root este cambio representa un cierre de puertas inesperado.
La desaparición de esta opción no es una mera coincidencia. El código del firmware lo confirma, así como testimonios de quienes ya han probado las versiones beta del nuevo software. Aunque Samsung aún conserva la posibilidad técnica de desbloquear el bootloader, lo cierto es que ahora lo hará solo en circunstancias específicas y bajo su propio control, sin ofrecer acceso directo al usuario final.
Este giro marca una tendencia que no es exclusiva de Samsung. Otras marcas, como Xiaomi en China, también han endurecido las políticas relacionadas con el bootloader, limitando el control del usuario sobre sus propios dispositivos. En muchos casos, los usuarios han tenido que recurrir a métodos alternativos algunos arriesgados para recuperar ese acceso perdido.
¿Se trata de una medida para mejorar la seguridad? ¿O estamos ante un paso más hacia un ecosistema cada vez más cerrado, donde las marcas deciden qué puede o no hacer el usuario con su dispositivo?
Sea cual sea la intención, lo cierto es que con One UI 8, Samsung no solo actualiza su sistema. También redefine los límites de la personalización, dejando a muchos entusiastas fuera del juego que tanto disfrutan.
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