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Días pasados surgió en los medios la noticia de que el reciente MacBook Pro con procesador Intel Core i9 sufría problemas de temperatura, en concreto el nombre del proceso se conoce como thermal throtlling y lo que hace es un recorte en las frecuencias del procesador cuándo este opera a su máximo rendimiento para que el equipo no genere demasiado calor y se termine estropeando.

Pues, Apple ha confirmado que estos MacBook Pro 2018 sufren de dicho problema y proponen solucionarlo con una actualización de sistema.

Según los de Cupertino el problema se genera cuando el procesador hace un uso elevado de las frecuencias, esta actualización caparía un poco (no sabemos cuanto) el rendimiento del portátil para que esto no pase a mayores.

La actualización llegó hace muy poco a macOS y hasta ahora no hay reportes de que el problema no haya sido solucionado, estaremos atentos a nuevos reportes.

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Todo esto nos lleva a preguntarnos ¿Los fabricantes están probando de manera adecuada sus equipos?

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Anteriormente las Surface de Microsoft tenían problemas, ahora las MacBook Pro, dispositivos premium que son muy costosos y que al ser premium no deberían ocasionar este tipo de fallas.

Si posees un MacBook Pro ‘de los afectados’ te aconsejamos actualizar tu sistema macOS High Sierra a la versión 10.13.6, también dicha actualización está disponible mediante la herramienta de actualización de Apple.

Ahora bien, ¿Esto es tan grave cómo se dice? No lo es, si la solución pasa por un tema de software y con un parche queda solucionado podríamos decir que no lo es, ahora, si el problema persiste y es un tema de Intel con sus nuevos procesadores, ya hablamos de un asunto más grave y que tanto Apple como Intel deberían cuidar.

Nos interesaría saber tu opinión sobre el tema y aún más si eres poseedor de un MacBook Pro 2018 ¿Crees que es un asunto grave o piensas que es un error menor? ¿La actualización ha corregido el problema?


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